María Rosa D´Elia Demetilla

__Derrumbando estructuras                                                                       

Cuento de  María Rosa D. D.   21-02-2011-      

 Publicado en  Antología ‘Los cinco sentidos’  Tapa MariaRosa D.D.

 Maruca se dio  vuelta, acomodo su cabello, y…  pensando con fastidio entre movimientos rápidos, fríos cortantes,  se dijo ¡Estos días de humedad…! Caramba arruinan mi pelo…

No eran estos días de humedad, era ella al no saber que pasaba  en su interior. Siempre tan formal, tan dama, tan  clásica, tan estructurada, tan reprimida en su sentir… ¡Y tan pre-juiciosa… ¡

                   

  De pronto…un cambio a su vida…

  Enojándose consigo misma  se dijo en voz alta  ¿Qué se cree ese…? ¿Con que derecho interrumpe mi vida… alborota mi corazón, pone alas a mis pies?

¡No voy a dejarme envolver con palabras!  añadió con rabia  ¿bella,  linda…?   ¿Yo?

 ¿Qué se habrá creído…?  Su corazón la oía, pero no podía opinar, se enojaría con él.  Desde  un lejano  día que  dijo ¡Basta…! Él  se asustó… Era tan romántico… Pero acato la  orden,  y allí quedo mustio, quieto, viendo como las hojas de los otoños caían año tras año…

  Ahora se siente como al galope, que no se puede detener… No  sabe que hacer… No  quiere enojar a su ama… ¡porque cuando lo hace es brava…! ¡Ah…! si la conocerá él… 

  El pobre se acostumbro a una vida sin amor, sin ternuras que tanto necesitaba su dueña… ¡Si la habrá visto llorar…! tanto…tanto… Al verla sola,  aún  en compañía…Era un animal herido, sangrante… Siempre atenta al peligro… Pobre mi señora… Ella tan plena para amar y dejar que dulces palabras la acariciaran, la hicieran sentir tan mujer, tan ardiente…tan sensual en la entrega…

  ¡Por favor corazón…!  No intervengas en esto… le dice al notar que él, la quiere invadir…

  ¡Ya no es tiempo para sueños… ¡ Compréndeme corazón mío…  solo me dejaran heridas… Solo volverán a lastimarme…

 Pobre mi señora…  susurra el corazón. Sus ojos están llenos de lágrimas… Parecen perlas blancas… ¡perfectas…! Conociéndola… aunque parezca entregada… me va a dar batalla va luchar con uñas y dientes por no dejarme emerger… 

   Abruptamente ve que busca un pañuelo… su cartera cae, recoge todo con rabia… Seca sus ojos   

 ¡Hay corazón…! ¡Este verano que resfría a todos...!  Balbucea entre llantos…

                                                                                                     Maria Rosa D. D.  

                                                     21-02-2008